sábado, 20 de octubre de 2007

PAYADA ENTRE MARTIN FIERRO Y EL MORENO





(Martin Fierro)
Dios hizo al blanco y al negro sin declarar los mejores; les mandó iguales dolores bajo de una mesma cruz; mas también hizo la luz pa distinguir los colores.
Ansí ninguno se agravie; no se trata de ofender; a todo se ha de poner el nombre con que se llama, y a naides le quita fama lo que recibió al nacer.
Y ansí me gusta un cantor que no se turba ni yerra; y si en tu saber se encierra el de los sabios projundos, decíme cuál en el mundo es el canto de la tierra.

(El Moreno)
Es pobre mi pensamiento, es escasa mi razón; mas pa dar contestación mi inorancia no me arredra; también da chispas la piedra si la gólpea el eslabón.
Y le daré una respuesta sigún mis pocos alcances; forman un canto en la tierra el dolor de tanta madre, el gemir de los que mueren y el llorar de los que nacen.

(Martin Fierro)
Moreno, alvierto que trais bien dispuesta la garganta; sos varón, y no me espanta verte hacer esos primores; en los pajaros cantores sólo el macho es el que canta.
Y ya que al mundo vinistes con el sino de cantar, no te vayás a turbar no te agrandes ni te achiques: es preciso que me espliques cuál es el canto del mar.

(El moreno)
A los pájaros cantores ninguno imitar pretende; de un don que de otro depende naides se debe alabar, pues la urraca apriende a hablar pero sólo la hembra apriende.
Y ayudamé ingenio mio para ganar esta apuesta; mucho el contestar me cuesta pero debo contestar: voy a decirle en respuesta cuál es el canto del mar.
Cuando la tormenta brama, el mar que todo lo encierra canta de un modo que aterra, como si el mundo temblara; parece que se quejara de que lo estreche la tierra.
Jose Hernandez

1 comentario:

paula luna dijo...

Gracias Ariel. La aparición del Moreno tiene relación con lo que leímos el otro día, el enfrentamiento.
Paula